Salimos por la puerta principal del Resort, girando hacia la izquierda dirección la playa, y llegamos a una bifurcación que nos indicaba dirección Castell de Tamarit. De allí empieza un ligero ascenso hacia la puerta del mismo castillo, al que no se puede entrar porque es propiedad privada, pero aprovechamos la salida de un coche para ver fugazmente la zona de la entrada.
Nos encontramos en una zona plana donde se puede bajar hacia Cala Jovera, una cala preciosa en la parte posterior del Castell de Tamarit, o seguir por el sendero indicado en los mapas, que es lo que hicimos para iniciar la excursión
El sendero está bien marcado y solo hay que seguir las marcas blancas y rojas situadas en rocas y árboles. La primera parte es un camino entre árboles donde lo más bonito es girar la cabeza atrás porque hay algún momento que hay importantes panorámicas del Castell de Tamarit.
Llega un momento que el sendero se abre a la vegetación, y empiezas a caminar entre rocas con grandes acantilados erosionados por la fuerza del Mar Mediterraneo. Es una zona difícil, así que a los niños, por seguridad, hay que llevarlos bien cogidos de las manos para evitar cualquier percance.
Este lugar nos recuerda a las escenas vistas de la serie La Catedral del Mar que se rodaron justamente ahí en los acantilados.
De repente el camino empieza un ligero ascenso que nos adentra en un bosque frondoso, ya que por la roca ya no había paso posible
Para finalizar, el sendero se convierte en un ancho camino de tierra y gravilla, donde se pueden ver una casas de lujo impresionantes que nos hacen más ameno todo el trayecto.
Llegamos a la bifurcación de Platja de la Mora pero como los niños estaban cansados y el cielo estaba amenazando con lluvia torrencial, decidimos no bajar a la playa, y deshacer nuestros pasos de una forma más ágil, y para que así ellos tuvieran más tiempo de disfrutar del camping por la tarde.
Primera excursión senderista fácil, corta y muy entretenida, que se puede alargar si se quiere hasta la mismísima Tarragona pasando por puntos como Torre la Mora o la Platja Llarga, pero ello si que son muchos kilómetros
Familia Tokers.
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