Después de la cancelación del año anterior de las vacaciones a México motivada por la famosa Gripe A que nos llevó a cambiar el viaje rumbo a Egipto, este año sin este problema internacional sanitario, ya que nos habíamos quedado con las ganas, reservamos por fin una semana en la tan deseada Riviera Maya.
Mirando muchísimos hoteles nos decidimos por la cadena hotelera Gran Bahia Principe, y dentro de su resort de 3 hoteles elegimos el Hotel Akumal por su localización y por su playa privada propia, con una oferta con vuelos, traslados y alojamiento en todo incluido.
Cruzamos por primera vez en nuestras vidas el charco en un vuelo directo desde Barcelona con destino Cancún y en unas cuantas horas pisábamos suelo caribeño en el Aeropuerto Internacional de Cancún. De allí, traslado por la carretera Federal de una hora aproximadamente a nuestro hotel.
Solo llegar al hotel todo es un sueño. Ya en la recepción te reciben los mariachis, te ponen la pulserita de todo incluido y a disfrutar de una semana inolvidable en el paraíso.
Como el resort es muy grande disponen de unos trenecitos para llevarte de lado a lado, pero la verdad es que tuvimos mucha suerte con la habitación que nos tocó. Era una habitación muy grande, planta baja, muy cercana a la recepción del hotel, muy cerca de las piscinas, del buffet y de la playa, con un snackbar al lado mismo de la habitación.
El hotel Gran Bahía Principe un lujo de hotel con todas las comodidades y servicios, unas piscinas impresionantes, unos trabajadores muy atentos en cada momento, una playa privada de ensueño y unos restaurantes temáticos de lujo: italiano, japonès,... que disfrutábamos cada noche, junto unos buffets con multitud de comida variada tanto mejicana como internacional.
Todas las instalaciones están distribuïdas entre los 3 hoteles y puedes acceder a cualquiera de ellos.
Mención especial las piscinas espectaculares con sus bares dentro de las mismas piscinas, y las playas paradisiacas del hotel con el agua azul turquesa reluciente, donde podias nadar junto a los peces o relajarte con la tumbona en la orilla.
Este viaje tendrá muchos momentos para el recuerdo, però nunca nos olvidaremos que fue allí, en el Teatro Principal del hotel donde vivimos el mítico gol de Iniesta en la final del Mundial contra Holanda. Era nuestro segundo día de viaje y coincidió con la final, donde montaron una pantalla gigante y allí nos reunimos todos los españoles alojados para disfrutar de un día inolvidable, y de una victoria histórica.
Respecto a las excursiones nosotros somos muy activos y no nos íbamos a quedar una semana encerrados en el hotel con el todo incluido, y no paramos de hacer excursiones a cada cual más divertida, interesante y bonita
Excursiones como las ruinas de Tulum, la natural Xel-ha, Xcaret, la impresionante Chichen Itzá, la movida Playa del Carmen, los cenotes o las Playas de Akumal.
Es aquí donde tengo la crítica a este gran viaje ya que nos faltaron días para disfrutarlo de todo. Nos faltaron días para visitar Coba, para ir a más cenotes, para hacer la excursión de Sian Kaan y para disfrutar más días en el hotel y en las playas.
Por este motivo, ya tenemos decidido en un futuro volver a este destino tan maravilloso
Familia Tokers.
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