Y por fin llegó uno de esos días marcados en rojo en el calendario del viaje, cosa que significaba nuestra llegada a tierras rusas, y nuestra excursión por la bellísima San Petersburgo.
Como el barco hacía noche en la ciudad, contratamos excursión con guía de habla hispana con la empresa Shore2shore que nos dividiria los dos días en dos excursiones diferentes, donde el primero transcuriría por la Ciudad y el segundo día por los alrededores, con una excursión nocturna incluida, Gracias a contratar la excursión con agencia nos ahorramos todos los trámites del visado necesarios para poder desembarcar en Rusia
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| Mapa de San Petersburgo (Rusia) |
El día amaneció gris y lluvioso, y después de pasar el control estricto de pasaportes, nos fuimos juntando con el grupo de españoles para comenzar la visita en autobús con un recorrido panorámico de la ciudad.
La primera parada, aunque lloviera levemente, fue en el muelle de las Esfinges egipcias junto al río Neva y justo delante del Edificio de la Academia de Artes que nos ofrecía la primera visión de San Petersburgo a través de su malecón
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| Muelle de los Esfinges |
Seguimos el camino para hacer de nuevo una parada panorámica, justo en un barco restaurante pirata, que nos daba una panorámica perfecta del verdiblanco Museo Hermitage, que nos tocaría visitar un poco más tarde.
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| Río Neva |
Siguiendo con la visita panorámica y casi la lluvia desaparecida hicimos una de las cosas típicas que los turistas realizan en San Petersburgo, un paseo en barco por los ríos y canales de la ciudad, con el muelle justo pegado al Hermitage
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| Paseo por los canales |
Nos ofreció la posibilidad de descubrir durante una hora la ciudad desde otro punto de vista, pasando por debajo de sus variados puentes y saliendo a navegar directamente al Río Neva, teniendo una panorámica de los diferentes puntos importantes.
Finalizada la excursión en barco nos esperaba una de las joyas de San Petersburgo, la visita al Museo Hermitage, con unas interminables colas en la entrada, que pudimos esquivar rápidamente ya que íbamos en un grupo con guía programado. Nos entregaron unos cascos que nos permitía escuchar a la guía aunque estuviéramos alejados.
El Hermitage es uno de los mayores museos del mundo donde podemos encontrar la antigua residencia de los zares.
La duración de la visita fue casi de 3 horas, mientras que disfrutábamos de salas cual más bonita que la anterior, Arnau iba en su sillita de paseo jugando con su tablet.
La realidad no se como describir todo lo que vimos en el interior, repleto de riqueza y oro, así que dejo varias fotos para explicarlo mejor. Vale más una imagen que mil palabras.
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| Museo Hermitage |
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| Plaza del Palacio |
Después de una larga mañana, tuvimos tiempo libre para comer donde el punto de encuentro fue la Catedral de Nuestra Señora de Kazán, que nos recordó mucho al Vaticano en dimensiones más pequeñas,
Como no queríamos perder ni un minuto de nuestro día en esta maravillosa ciudad, comimos rápido en un local colindante, para posteriormente cruzar la Avenida Nevski e ir a través del canal hacia la cercana Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada.
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| Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada |
Cuanto más te vas acercando más impresionante te parecía, con sus magníficas cinco cúpulas. Lástima que el día nuboso hacía que no fuera tan bonita como en algunas fotos habíamos visto a pleno sol del día.
Aprovechamos para realizar varias instantáneas panorámicas para el recuerdo con la Iglesia y los canales de San Petersburgo, para rápidamente volver al punto de encuentro de la excursión.
Por la tarde, la primera visita era de nuevo a la Iglesia del Salvador de la Sangre Derramada en su interior. Ya habíamos visitado rato antes su fachada y su bonita panorámica pero el interior de la misma tampoco se queda atrás.
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| Interior Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada |
Repleta de turistas, y con un poco de sensación de agobio ya que su interior no es muy grande, pudimos ver su sorprendente decoración basada en gigantescos mosaicos.
Nuesto siguiente lugar de visita era la Fortaleza de San Pedro y San Pablo situada en una isla dentro del río Neva, y que se construyó como una fortaleza´.
Destaca la Catedral dorada donde están enterrados la mayoría de los zares pero que no pudimos visitar correctamente porque nos encontramos un servicio religioso en el lugar bastante estricto.
Caminando por la Fortaleza nos encontramos una más que curiosa estatua de Pedro I, con unas proporciones realmente desproporcionadas que eran una pequeña cabeza, un cuerpo alargado y unas manos muy grandes.
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| Fortaleza de San Pedro y San Pablo |
El último lugar a visitar era la Catedral Smolny transformado en convento, edificio destinado a Isabel hija del zar Pedro el Grande.
Fue una parada breve para poder ver de forma exterior un edificio emblemático en tonos blancos y azules.
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| Catedral Smolny |
De Smolny directamente al barco a ducharse, a refrescarse y cenar alguna cosa rápida, porque faltaba la excursión nocturna.
EXCURSION NOCTURNA POR SAN PETERSBURGO
A las 23 h de la noche comenzaba una excursión nocturna de 3 horas de duración donde el principal cometido era el levantamiento de los puentes en el Río Neva.
Dentro del grupo de la excursión sufrimos bastantes bajas por el cansancio, como en mi caso, que realicé la excursión solos ya que para Arnau era demasiado tarde y al día siguiente había que madrugar para seguir con otro día largo de visitas.
Comenzamos la excursión con una visita panorámica en autobús para disfrutar la ciudad iluminada, realmente espectacular, pasando por la Avenida Nevski, de nuevo por Smolny y parando en la Catedral de San Isaac donde no habíamos podido casi parar por la mañana por la lluvia.
Pero nuestro destino era la orilla del río Neva para poder disfrutar in situ el momento cuando los puentes levadizos se pusieran en acción, así que con bastante tiempo buscamos un lugar con buena panorámica para poder verlo y hacer las mejores fotos posibles
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| Excursión Nocturna por San Petersburgo |
El río se llena de barcos de todo tipo a la espera de la apertura, y en un momento determinado ves como un puente inmenso comienza abrirse por ambos costados permitiendo a las embarcaciones pasar por su parte inferior, y todo con ello con la ciudad de San Petersburgo iluminada. La verdad que un auténtico privilegio y un momento para recordar.
Finalizado el gran momento de nuevo al autocar para dirigirnos al Eurodam para aprovechar las pocas horas de sueño para estar a tope para el segundo día en Rusia
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Familia Tokers.
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