Para las Navidades de 2019 quisimos repetir la experiencia vivida de cuando Arnau era pequeño de disfrutar nuestra vecina Barcelona en época navideña, donde la ciudad se transforma con el espíritu de la mágica Navidad, y nos ofrece experiencias y actividades muy especiales en una ciudad completamente iluminada.
Para ello reservamos tres noches en Barcelona en el Hotel Attica 21 de cuatro estrellas situado en el Front Marítim del Poblenou a escasos metros de la Platja de Llevant, muy cerca del Centro Comercial Diagonal Mar y muy cerca de la parada de metro Selva de Mar que nos llevaría a todas muestras excursiones, ya que a Barcelona fuimos en tren directo desde Tarragona, acompañados por nuestro amigos.
Como eran cuatro días en total, y teníamos muchas actividades pensadas para realizar, el planning por Barcelona fue bastante denso sin casi descansos ni por la mañana ni por la tarde, para aprovechar al máximo la escapada navideña.
Comenzaríamos con las dos primeras excursiones con dos sorprendentes museos de Barcelona, la primera tarde con Big Fun Musem que está en las Ramblas de Barcelona y la mañana siguiente al Museu de les Il-lusions. ambos son museos super divertidos con grandes sorpresas en su interior.
La siguiente tarde era una de las tardes más esperadas por los pequeños con la mágica visita a la Fabrica dels Reis Maigs de Fabra i Coats para entregar sus cartas a los Reyes de Oriente.
La penúltima jornada fuimos a visitar el precioso Poble Espanyol caracterizado y decorado especialmente con toques navideños, con un aire muy distinto a la vista que le hicimos tres años atrás,
El último día fuimos a la Fira de Barcelona para que los niños disfrutaran en La Ciutat dels Somnis, el festival más grande dedicado a la infancia con más de 120 actividades.
Entre excursión y excursión planificada hicimos alguna actividad diferente como por ejemplo solo llegar y sin tener aun las habitaciones del hotel nos acercamos al Parc Diagonal Mar donde en el propio parque han creado la Muntanya Mágica dels Tobogans. En un pequeño montículo en el centro de este parque del Barrio del Poblenou nos encontramos cuatro toboganes gigantes de medidas e inclinaciones diferentes para tirarnos a toda velocidad, pero eso si, tuvimos que llevar bolsas de plástico para ir más rápido porque si no iban bastante lentos.
Tambien visitamos el centro de la ciudad con el curioso belen de la Plaça Sant Jaume, y aunque no estaba el mercado navideño de Santa Llucia también fuimos a ver la Catedral de Barcelona.
Una de las noches nos quisimos acercar a ver el ambiente de las Ramblas de Barcelona para disfrutar de la Fira de Nadal del Port Vell, donde destaca en un lugar emblemático de Barcelona justo delante del mar una noria gigante desde la cual poder ver la ciudad, un pesebre flotante y una iluminación de todo el recinto espectacular.
Cuatro días magníficos disfrutando de las diferentes actividades navideñas que nos ofrecía la ciudad de Barcelona, que en estas fechas tan señaladas se transforma en uno de los mejores lugares del mundo para disfrutar tanto niños como adultos del mejor ambiente navideño.
Familia Tokers.
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