NÁPOLES (2019)

Nuestro siguiente destino después de descansar en el día de navegación era la ciudad italiana de Nápoles, que es el único puerto que hemos repetido en nuestros tres cruceros por el Mar Mediterráneo. Como bien dice el refrán no hay dos sin tres, y bien que vale la pena repetir

Buscando nuevas propuestas de excursiones, nos decantamos por visitar Nápoles Subterránea, que consiste en unos túneles  convertidos en uno de los entramados más grandes de Europa situado bajo el centro histórico de Nápoles

El barco atracó como siempre en el centro de la ciudad, y salimos temprano porque queríamos llegar a las 10 horas al acceso de Nápoles Subterráneo y teníamos unos treinta minutos caminando hacia allí.

Salimos por el edificio principal encontrándonos con multitud de taxistas napolitanos ofreciendo todo tipo de excursiones a los cruceristas, y entrando en la pasarela con acceso directo a Castel Nuovo, un castillo medieval con su imponente arco de triunfo con mármol blanco.

 

De allí cogimos la avenida Corso Umberto, en dirección al centro histórico de Nápoles, lugar que no habíamos pisado en nuestras dos visitas anteriores. En 2006 decidimos ir a Pompeya y luego visitar la zona más cercana al puerto y en 2008 cogimos el funicular hacia el barrio de Vomero.

Esta tercera visita a la ciudad napolitana nos dio la posibilidad de conocer aquella Nápoles sucia y caótica, que tanta gente nos había explicado.

 

De camino a nuestro destino pasamos por la Plaza de Gesu Nuovo con la anécdota de un gran cartel de la serie La casa de papel, paseamos por las calles peatonales del casco histórico  y también nos encontramos con el busto de Pulcinella que es un personaje típico napolitano, al que tienes que tocarle la nariz, para tener suerte.

 

NÁPOLES SUBTERRÁNEA

 

Muy cerca de Pulcinella ya nos encontramos con el cartel de Napoles Subterranea donde ya nos encontramos cola de turistas, pero tuvimos la gran suerte que había cuatro españoles esperando y pudimos crear un grupo con una guía de habla hispana solo para nosotros.

 

 

La visita guiada comienza descendiendo más de 100 escalones para llegar a 40 metros de profundidad donde se notaba un cambio de temperatura importante con respecto al calor del exterior, escaleras con final  en una gran galería que nos situaba en las entrañas de la ciudad para recorrer una serie de estrechos túneles para iniciar un viaje por la Historia de Nápoles.

 

 

Los túneles primero fueron creados para el abastecimiento de agua, después como refugio durante la Segunda Guerra Mundial y posteriormente como basurero.  En nuestros tiempos, se ha recuperado como uno de los reclamos turísticos más importantes de Nápoles, y en interior podemos ver con pequeñas exposiciones los diferentes usos que ha ido teniendo

 

La parte más espectacular de la visita es cuando te entregan una vela y se pasa por estrechos pasadizos, que solo podía pasar una persona y de lado, llegando a visitar las diferentes cisternas. Es el momento que los niños más disfrutaron y mejor se lo pasaron con la única iluminación de las velas, y añadiéndole que llevábamos para ellos unas pequeñas linternas y unos punteros laser.

 

 

La visita se complementa con el Teatro Grecorromano también subterráneo, pero con la curiosidad que accedimos desde una casa particular que nos abrió una compuerta en el suelo que daba acceso al Teatro. Por lo que nos explicó la guía, se conserva casi en su totalidad pero se crearon casas aprovechando sus muros y actualmente están viviendo vecinos napolitanos.

 

 

Finalizada la visita de aproximadamente hora y media, volvimos tras nuestros pasos para caminar por el centro histórico de la ciudad, finalizando nuestro trayecto dirigiendonos hacia dos lugares que hacia once años que no visitábamos y que nos encantan, como son la Piazza Plebiscito y las Galerias Umberto, situadas bastante cerca del puerto.

 

 

Después de estas dos breves paradas, como los niños estaban muy cansados porque habían caminado muchísimo por los túneles dimos por concluida nuestra visita napolitana, esta vez con una visión diferente de la Nápoles que conocíamos de los dos visitas que habíamos realizado anteriormente, pero manteniendo su encanto.