MALLORCA (2019)

Siguiendo nuestro recorrido por las Islas Baleares, en este segundo día de excursiones nos tocaba visita en la isla de Mallorca donde la visitábamos 11 años despues.

Dividimos el día por la mañana visitando Les Coves del Drach al este cerca de Manacor y por la tarde un paseo cultural por el centro de Palma de Mallorca.

Mallorca significaba la segunda parada de nuestro crucero, y como de nuevo la parada era muy larga nos dio opción a planificar dos excursiones bien diferenciadas teniendo tiempo de ir a comer al barco.

COVES DEL DRACH

La elección de la excursión después de mucho debatir de que podíamos hacer fueron las famosas Coves del Drach situadas a una hora al este de Palma de Mallorca.

Miramos las opciones para llegar allí de forma libre pero era bastante complicado así que decidimos contratar la excursión con Click Mallorca, que consistía en el traslado en autobús hasta les Coves y una breve parada en la Tienda Majorica de Perlas en Porto Cristo, y guía para toda la excursión

 

 

Pactamos en la reserva un punto de recogida cerca de la salida del puerto de cruceros, y a la hora convenida allí estaba nuestra guía esperandonos con el autobús que poco a poco se fue llenando de otros muchos cruceristas.

 

Emprendimos el camino de una hora aproximada que se tarda de cruzar Mallorca de este a oeste, mientras la guía micrófono en mano, nos explicaba todas las curiosidades y costumbres de la zona.

Llegamos a Porto Cristo, cerca de Manacor,  donde hicimos la primera parada de treinta minutos en la típica tienda de Perlas Majorica. La verdad no era un lugar que nos llamara mucho la atención pero estaba incluida en la excursión a lo que realmente nos interesaba que era la visita a las famosas Coves del Drach.

El autobús nos dejó en la misma puerta, nos entregaron las entradas y empezamos la visita a a les Coves descendiendo unas escaleras en las que ya comenzábamos a notar un cambio de temperatura considerable ya que la temperatura interior es de unos 21 grados

La visita dura alrededor de una hora, y el recorrido es de unos 1.200 metros, mientras se recorren estancias especiales que la naturaleza ha ido creando con el paso del tiempo.

 

 

La visita finaliza en el Lago Martel, uno de los Lagos subterráneos más grandes del mundo

Una vez allí empieza lo que consideramos la parte más mágica de la visita. Frente al lago nos podemos sentar en un especie de gradas, se apagan las luces y aparece una barca con cuatro músicos que nos deleitan con un precioso concierto de música clásica. La escenificacion de los músicos encima de las barcas, la luz suave que ilumina la oscuridad de la cueva, hacen que sea un momento inolvidable.

Al final de la actuación musical, se da la visita por concluida, teniendo dos opciones para abandonar el lugar, siendo la más bonita y especial la de hacerla en barca navegando por los Lagos Martel en un recorrido de apenas un minuto.

Casi todo el mundo decidió la opción de utilizar las barcas y creó unas colas interminables, ya que en cada barca solo cabian un número limitado de personas. También fue culpa nuestra ya que en las gradas nos situamos en el extremo más opuesto.

 

 

A la salida de Les Coves del Drach, nos esperaba el autobús para llevarnos directamente a las puertas de acceso del Costa Neoriviera junto los demás cruceristas que también viajaban con otros cruceros

PALMA DE MALLORCA

 

Por la tarde tocaba la segunda parte de la excursión, que consistía en dar un paseo tranquilo por el centro de Palma. 

A diferencia de nuestra visita hace 11 años en MSC que atracó en el puerto más cercano al Paseo de Palma, esta vez con Costa atracamos en el puerto más alejado y por tanto nos era imposible llegar caminando al centro de la ciudad, así tomamos la opción de coger dos taxis que nos dejaron a los pies de La Seu, la famosa Catedral gótica de Mallorca.

Nos encontrábamos en el Parc de la Mar, con su precioso lago natural de agua salada, y empezamos a inmortalizar el momento con todas las fotos panorámicas posible con la magnífica Catedral de Mallorca de fondo, fotos familiares, grupales y de toda indole.

 

 

Seguimos caminando por el Passeig Dalt Murada, donde nos encontramos entre otras cosas un mercadillo de productos típicos de la tierra que permitió que mientras unos compraban los pequeños disfrutaran tantos de los columpios como de explotar pompas de jabón

 

 

Emprendimos camino arriba ascendiendo las escaleras que nos llevaban a las puertas de la Catedral de Mallorca, mucho más majestuosa de cerca, con sus típicos carruajes de caballos en sus alrededores y sus cañones en la entrada.

Decidimos no entrar a ver el interior, para perdernos callejeando por Palma hasta encontrar su magnífica portificada Plaça Major, y seguir disfrutando de su zona peatonal comercial.

 

 

Como los niños estaban bastante agotados después de un día completo, decidimos volver a coger dos taxis de vuelta para llegar tranquilos a la cena y así disfrutar del espectáculo de teatro nocturno que nos ofrecía el Costa Neoriviera, dando por concluido nuestro segundo por tierras baleares.