En nuestra visita a Toulon decidimos que lo más divertido para todos sería coger el Teleférico de Mont Faron para disfrutar de las mejores vistas panorámicas de la ciudad francesa.
De todas formas había mucho ambiente de gente porque en la Plaza Louis Blanc donde estaba situada la Oficina de Turismo y en las calles peatonales colindantes como la Cours Lafayette, había un gran mercado con productos típicos de la zona, y aprovechamos el tiempo para visitar el mercado y para pasear por el centro histórico de Toulon.
Como lugares a remarcar que llamaron nuestra atención fue la Plaza de Victor Hugo con la imponente Opera de Toulon, la Calle de los Artistas y la Catedral de Notre Dame de la Seds
A la hora indicada volvíamos a la Oficina de Turismo a comprar los tickets, y a escasos metros teníamos la parada del autobús de la Línea 40 que nos llevaba a Mont Faron en un trayecto de treitna minutos.
Aquí es donde tuvimos la anécdota del día y el retraso que nos hizo empeorar nuestra excursión en cierta medida por culpa del conductor del autobús, ya que muchos turístas y también autóctonos se agolpaban en la parada y mientras subíamos cerró las puertas, haciendo que nuestro grupo se separara por completo y haciéndonos perder unos 30 minutos que al final se convirtió en algo más porque las colas para coger el Teleférico se hicieron interminables
Ya subidos al rojo Teleférico de Mont Farón pudimos disfrutar durante el ascenso de los 584 metros de altura de las estupendas vistas de la Bahía de Toulon con el Mar Mediterráneo de fondo, recordándonos en cierta medida al Funicular de Funchal en la Isla de Madeira, con la diferencia que cuando llegas arriba hay multitud de senderos para disfrutar, el zoo de la ciudad, un Memorial de la Guerra Mundial y varios bares y restaurantes
Antes de empezar a descubrir lo que el Mont Faron nos ofrecía nos hicimos las fotos de rigor con las vistas espectaculares buscando que el propio Teleférico nos acompañara en las mismas.
Sin rumbo marcado y con un sol asfixiante, empezamos a descubrir Mont Faron, por los diferentes senderos, pasando por el Memorial Faron hasta parar a recobrar pilas con unas bebidas y unos helados en un restaurante con varios animales enjaulados
Calculando el tiempo y las colas de vuelta dimos por finalizada la visita al Mont Faron porque tocaba hacer el camino inverso en autobús y viendo la experiencia de la ida no queríamos tener problemas de horarios con la salida del crucero a la vuelta. Por suerte, apenas hicimos veinte minutos de cola en el Teleférico de bajada y diez minutos de espera en el autobús para llegar en buena hora al Costa Neoriviera.
Acababa aquí un itinerario de nueve excursiones recorriendo lugares increíbles por tres países diferentes como Francia, Italia y España añadiendo el mérito de conseguirlo con excursiones por libre previa recogida de mucha información a través de internet y de los diferentes blogs de viajes.
Familia Tokers.
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