Abu Simbel era la gran excursión en nuestro crucero por el Nilo y por ello era de pago opcional con precio aparte, cosa que no dudamos ni un momento en contratar.
El primer día de estancia de Assuan a las tres de la mañana partíamos en una furgoneta en una caravana de autobuses y furgonetas con un trayecto de 3 horas hacia Abu Simbel a través de una carretera que cruza el desierto.
Es un viaje que se hace largo pero con la esperanza de que lo que te vas a encontrar vale muchísimo la pena
Esta localizado tan lejano motivado por la construcción de la presa de Assuan que hizo que se moviera piedra a piedra para evitar que se quedara bajo el río o se deteriorara, por las crecidas.
Cuando llegas te das cuenta que el viajecito ha valido la pena, ya que situado delante del Lago Nasser te encuentras una edificación que es la mas hermosa de lado a lado del Nilo, que simplemente te deja con la boca abierta por lo grande que es y por lo espectacular.
Mandado construir por Ramses II es considerada una maravilla del mundo, creado en la propia montaña, y con dos templos contiguos geniales el Templo de Ramses II y el Templo de Nefertari, con estatuas al exterior inmensas que cuando te acercas a la entrada te das cuenta de su auténtica magnitud.
Ambos templos son preciosos por fuera pero mas maravillosos son por dentro, pero no te dejan hacer fotos del interior, y por ello debimos guardar todo lo que vimos en nuestras retinas.
Ayuda muchísimo a que todo sea tan bonito que los templos presiden el Lago Nasser.
Después de estar varias horas disfrutando de un lugar único, venía lo peor que era hacer el camino de vuelta, pero volvimos con la sensación que habíamos visto algo muy grande
Familia Tokers.
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