Nuestra primera excursión era a la ciudad francesa de Marsella, situado en el sur de Francia dentro de la costa azul.
Situamos como epicentro de la excursión el antiguo Puerto de Marsella considerado el corazón de la ciudad, un puerto muy bonito en forma de U, rodeado de preciosos edificios y repleto de pequeñas embarcaciones que todo en conjunto desprende un ambiente muy pintoresco.
Volvimos al antiguo Puerto para coger un trenecito turístico que nos llevara a ver en lo alto de la colina la Basílica de Notre Dame de la Garde. con opción de ida y vuelta y resguardados del intenso calor del mes de Agosto.
Después de un recorrido bastante divertido con grandes cuestas que parecía que el tren no podia subir, estábamos ya a los pies de la Basílica.
El exterior te ofrece un edificio precioso poco típico de las catedrales que estamos acostumbrados a ver, y por su entorno al estar a lo alto ofrece unes vistas tanto de Marsella como del Mar Mediterráneo espectaculares.
Si el exterior es atípico aún lo es más el interior con un estilo como oriental, que da una imagen muy diferente y muy especial a la vez, con una gran variedad de colores.
Si el exterior es atípico aún lo es más el interior con un estilo como oriental, que da una imagen muy diferente y muy especial a la vez, con una gran variedad de colores.
Valió la pena muchísimo su visita y un lugar imprescindible en nuestra primera excursión
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